Pero la aventura no para ahí. Como teníamos ganas de despegarnos del circuito turístico, y dale con esta manía que tenemos, llegamos al pueblo de Maras, desde donde al día siguiente continuaríamos nuestra ruta, y el único hospedaje en el pueblo de 500 habitantes es la casa parroquial. Por lo que ya desde el taxi colectivo que nos llevaba al pueblo estaban llamando al cura para avisarlo. Finalmente no fue el cura si no Simeón quien nos recibió y tras enseñarnos nuestras habitaciones (en donde no teníamos ni baño ya que este estaba atorado, y por supuesto tampoco agua corriente, nos valíamos con una palangana de agua que nos trajo amablemente el señor) nos llevó de ruta por el pueblo para que compráramos algo de cena, ya que tampoco había ningún lugar donde poder cenar algo. Total, unos plátanos por un lado, un poco de pan por otro, agua, galletitas, queso y ya tenemos montado el banquete. Y vaya nochecita.
Y centrándonos en los lugares, visitamos Pisca, en donde hay una maravillosa ciudad Inca, por supuesto, de nuevo ubicada en las alturas. Paseando por entre las ruinas hubo algo que nos llamo la atención, e hizo que nos deleitara aun más el momento. Mientras caminábamos imaginándonos que podría ser cualquier cosa (no queríamos guías), nos llegaba el cantar de una Zampoña, flauta peruana, cuyo sonido dulce y penetrante te transportaba en el tiempo. Fue algo realmente maravilloso.
De aquí fuimos a las ruinas de Moray, que podríamos decir se trataba del laboratorio agrícola de los Incas. Hicieron balconadas de cultivos a diferentes alturas. En cada una había un microclima diferente, viendo cual era el más óptimo para cada tipo de producto. Interesante invento.
La siguiente parada fueron las Salineras. Estas provienen de las aguas termales que emanan de las montañas, y que ya fueron usadas por los Incas, y aún hoy en día están operativas. De aquí caminando a Urabamba, y en colectivo dirección Chinchero. Y fue aquí donde pudimos aprender cómo son las técnicas de los tejidos de la zona. Sentada junto a una mujer que nos explicaba cada paso y que tan sólo buscaba hablar un rato (le compramos luego algo de sus telares por supuesto).
Ya iba siendo hora de abandonar la zona de las montañas y dirigirnos a la playa, que nos llama, y nosotros a ella. Queremos respirar su aroma, ya que llevamos casi 3 meses sin deleitarnos con el mismo. Es por ello que tomamos rumbo a Paracas. Pero antes quisimos hacer una fugaz visita a Nazca y sus enigmáticas líneas.
Es curioso cómo cambia el paisaje en el momento que bajas los Andes por esta zona. Un desolador desierto que ni imaginábamos había al otro lado. Inmenso y realmente desierto. Nada, ni arbustos habitan estas tierras. Tras más de 11 horas de bus llegamos a Nazca y sobre la marcha ya estábamos montados sobre una avioneta, ya que queríamos dormir esa misma noche en el ansiado pueblo pesquero.
Los cuatro en una sola avioneta y despegamos entre ovaciones, risas y nervios. El paisaje te dejaba sin palabras. La inmensidad del desierto dibuja curvadas de forma natural, por el cauce de los cientos de ríos secos que la atravesaban. Y la primera curva llego acompañada de ese cosquilleo en el estómago que te hacía ver que efectivamente estabas volando. Y con ello vimos la primera línea “la ballena”. Y tras ella el astronauta, el cóndor, el mono, la araña, el árbol el colibrí, las manos, etc. Hay más de 300 figuras diferentes. Aun no hay una teoría aceptada por todos para determinar qué es lo que representan. Existe la teoría, por ejemplo, de que se trata de representaciones ligadas a los astros. Quién sabe, pero son alucinantes.
En la travesía aérea nuestro trepidante comandante nos mostró cómo funcionaba la gravedad, con rápidas bajadas en las que los papeles e incluso nosotros subíamos por el efecto de tan apasionante y diario fenómeno. Pero lo que nos dejó con la boca abierta fue cuando decidió “aterrizar” sobre la Panamerica, o por lo menos esa fue la sensación que todos tuvimos cuando estábamos a menos de 50m del suelo, y de repente tira para arriba rápidamente. Uuuuuuuhhhhh… Fue algo alucinante.
Y por fin la playa y el pescado. Paracas se trata de una península en medio del desierto que han hecho Reserva Natural. Resulta muy raro ver el desierto y el mar al lado. Se unió al grupo Molin una chica de Suecia con la que contratamos un taxi para que nos llevara a la tranquila playa de la Mina, donde nos bañamos y los relajamos bajo los suaves rayos de este sol de otoño.
De ahí fuimos para la playa de Lagunilla, donde hay unas pequeñas casas, junto al puerto, que son restaurantes, y lo único construido dentro de la reserva. Nos dimos el gran homenaje. Pescado y marisco realmente exquisito. A la llegada de los pescadores nos quisimos perder la oportunidad y les compramos algunas piezas del pescado fresco recién sacado de las barcazas, que esa misma noche comimos con un riquísimo asado que preparamos en el Hostel en el que estábamos. Lo más interesante de todo esto es como transportaban el pescado al mercado de la zona, en coches totalmente destartalados, y por supuesto apiñados.
La playa de la Mina. Paracas
Necesaria la tranquilidad del mar,
el ruido de las olas rompiendo,
los pescadores sus redes recogiendo
y los pelicanos zambulléndose a pescar.
Necesaria la burbuja de paz
que se envuelve en el silencio,
y los vientos alisios y el desierto,
y una niebla cargada de sal.
Necesario el goce de la espiritualidad,
la perdida de la noción del tiempo,
la búsqueda detrás de los recuerdos
que hacen los sentidos despertar.
En las conchas que recogimos en la playa esa noche hicimos pintadas. Cada uno pinto una cosa de cada una de las conchas. Por ello que el resultado viene dado por la creatividad conjunta de todos. Nos encanto el rato que pasamos y el resultado también (que va destino España).
A la mañana siguiente quisimos ver las Islas de Ballestas, que es la verdadera razón por la que la gente viene a este lugar. Son unas islas con una gran cantidad de aves, pingüinos y leones marinos. Nos deleitamos enormemente con todos ellos, y con esas grandísimas colonias de miles de aves. Había tramos de las islas en las que todo se veía negro debido a la cantidad de de ellas.
Y bueno tras todo esto, queríamos disfrutar de Peñas de música afro-peruana. Y para ello tuvimos la mala idea de querer ir a la cuna de este tipo de música. El distrito de “El Carmen” en el pueblo de Chincha. Y tras parar en medio de la Panamericana esperamos un colectivo en el que quepamos los 4 con las maletas. Finalmente las llevamos encima nuestra con un montón de gente dentro del “medio de transporte”. Llegamos a un poblado que aunque en principio nos podía llamar mucho la atención, por lo autentico del lugar, en cuanto nos enteramos de que no era temporada de peñas, no lo dudamos y salimos de nuevo rumbo hacia otro destino que tuviera playa. Y es que el calor se hacía sofocante.
Y fuimos hacia Cerro Azul ¿Y por qué? pues por que nos la había recomendado un artesano en Paracas, y la verdad es que no teníamos muchas más opciones. Resultó ser un pueblo de costa que en temporada de verano esta super animado, pero que en esta época del año … nada de nada. Bueno nos tenemos a los cuatro y con ellos nos basta. Entre charla y charla nos deleitamos, nos sentimos, nos quisimos, nos escuchamos, nos reímos y soñamos juntos. Fue una velada realmente muy especial y con el Pacífico como telón de fondo.
Cerro Azul
Las sombras del viejo malecón
sobre las incesantes olas
dibujan el vuelo de las gaviotas
mientras la bruma atenúa el sol.
Se tiñen algodones de malva y mora
el cerro desnudo en flor
refleja la puesta y el calor
y las perdidas luces de las horas.
Pacifico, frío e inmenso azul
escondes antiguas historias
en el desierto del Perú.
Las dunas, vírgenes victorias
moldeadas por los vientos del sur
que las conservas como momias.
De aquí rumbo a Lima, nuestra última parada antes de las inevitable y no deseada despedida. Han sido unas maravillosas semanas juntos en las que hemos vivido y sentido cada instante. En la que hemos reído, disfrutado, esforzado, sufrido, soñado, bailado, apoyado, escuchado, conocido y amado. Pero aun queda para ese momento, y además eso ya es parte de otra historia.
Un besazo enorme para todos.
Cris, Juanlu, Jandro y Jaime
Massaleros Vuelta al Mundo
por primera vez en todo lo k llevamos siguiendoos somos LAS PRIMERAS en deciros k nos encanta todo lo k veis sentis amais ...jeje
ResponderEliminarnos a enamorado las plyas en las k os refrescasteis y os lo pasasteis en grande
bueno xx si alguien se adelanta no escreibimos mas k os divirtais todo lo k se pueda
muxos bsnss Os keremoOOs muxisimoOoOo
Queridos massaleros:
ResponderEliminarMucho me ha impresionado vuestra aventura, esos "ruleos" con esos transportes (madre del amor hermoso)lo excitante de la avioneta, vale!!!!(porque lo que habeis visto desde lo alto, lo vemos los demás en fotos, aquí sale la "envidia cochina" poquitos serán los afortunados)pero esas horas en autobús,ese cargar con mochilas,pero todo lo contaís con humor, y es lo mejor de todo. Lo que teneís a vuestro alcance es aventura total, y con esa libertad de hacer lo que uno quiere.
A mi me parece que fué ayer, cuando estabaís en las playas de Brasil, (y vosotros sintiendo mono de playa) y es que ya pasó cantidad de tiempo.
Me imagino, a las dos J, que se les acaba la aventura, les haya sabido a poco.No desesperen, lo breve guay, dos veces bueno.
Hoy os mando un poema de deseos de Victor Hugo,como es muy largo, irá en fracciones.
"Te deseo primero que ames,
y que amando,también seas amado
y que de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores."
continuará....
Pero que envidieja me dais....Muchísimas gracias por compartir vuestra experiencia con todos nosotros, yo respiro un poquito de libertad cada vez que os leo.
ResponderEliminarUn besazo enorme, y seguid creciendo y dejándonos crecer con vosotros.
Pau_
Hola chicos, hacia tiempo que no os leia y la verdad se me han puesto los pelos de punta. Me encanta la forma que teneis de plasmar las experiencias y Juanlu cada vez se parece mas a Neruda. De verdad chicos seguis disfrutando asi y seguir haciendonos disfrutar a los demas. Leeros me trae muy buenos recuerdos y para que mentir tambien me da un poquillo de envidia.
ResponderEliminarUn besazo y suerte.
Chicos, ¡qué pasada! habéis pasado de las alturas a los desiertos, de las montañas al cielo, del cielo a la playa, lo vuestro es dejarnos con la boca abierta y con las sensaciones a flor de piel.
ResponderEliminarMe ha encantado esta nueva entrega de vuestro viaje, no paro de emocionarme cada vez que colgáis página nueva y es que no os podéis hacer idea de lo que nos estáis transmitiendo, entre fotos, poesías y comentarios, no nos falta nada(bueno, nos falta la compañía, aunque la sustituímos por este blog).
Seguid disfrutando y así también lo haremos nosotros.
Cuídaros y amaros. Un besazo.
Que pasadaaaaaaaa Chavales !!!!! no se os escapa ni un perejillll !!!!! Tela telitaaa con la avionetaaaa !!! los diente ya no lo tenemos largoooo yaaaaa no los pisamosss a modo de Rastrilloooo !!! hay me encantannnn todo lo que estais viviendoooo !!todos los lugares !! Pero para mi Nazca!!!! me ha causadooo un impactooo brutal !! vi un documental de Nazca que ; los aventureros del reportage hicieron lo mismo que ustedes !! cogieron una avioneta y fliparonnnn !!!
ResponderEliminarTengo que decir que la playa de la Mina "" no desmerece nada naditaa !!heeeeeee !!!! madre miaaaaaa que pasadaaaaa !!!! me encanta lo que estais haciendoooo gracias por compartir con nosotros todas estas maravillas !!
oS VEO COJONUDOSS !! gORDOS Y RECHONCHOSSS !!!la pial fantasticaaa y la mirada de completa felicidad !!! cuidaros mucho y protegeros tambien !! Os amo hasta el infinitooo y mas hayaaaaa !!!!!
Necesaria la tranquilidad del Mar..
ResponderEliminarNecesaria la burbuja de Paz..
Necesario el goce de la Espiritualidad..
Necesario un clinex porque acabo de llorar!!
Si no existiera esa playa de Mina y la Mano que la dibuja con palabras.. que felicidad y que paz tan profunda he sentido estando allí con vosotros por un instante..
Que buenas fotos! Que bien contado!! Que bien todo!!! Cris y las 3 Jotas Asturianas os amo a rabiar pero, aun amándoos eh! aun amándoos.. la envidia que tengo es muy muy cochinaaaa!!!!
Más cochina que Amagoya con una papeleraa!!!
Os veo fantásticos!! Seguid así de guapos, os mando muchos besos y lo más importante: GRACIAS!